¿LA MÍA?, QUE SE LA DEN A LOPERA O DEL NIDO

Ojú ¡miarma!, ya ha pasado el día de nuestra Comunidad Autónoma: Andalucía. También de nuevo se han entregado las medallas más devaluadas que creo se dan en España; aunque, a fuer de ser sincero, creo que en todos los sitios se cuecen las mismas habas.
Para que esas medallas tuviesen valor deberían ser concedidas en base a valores de aportación o ayuda al desarrollo de nuestra Región, entregadas a personas que se hayan sacrificado y aportado su trabajo, su conocimiento y su vida al engrandecimiento de Andalucía y por tanto de nosotros los andaluces.
Infinidad de artistas, futbolistas, abogados, periodistas, toreros, etc............ pero que casualidad aún ningún albañil, basurero, conductor de autobús, representante de comercio, bombero y un largo etc. de trabajadores andaluces aunque estoy seguro que alguno de éstos últimos ha debido realizar alguna labor benéfica merecedora de ser premiada con una de esas baratas medallas.
Entiendo que a las personas que se las entregan, en una inmensa mayoría famosos, ya deberían considerarse pagadas al haber desarrollado las habilidades o inteligencia que les ha dado Dios en su nacimiento y que les han procurado una muy cómoda forma de vivir y una posición económica y social ventajosa. Por no irnos más atrás, alguien me puede explicar que le han dado a Andalucía los jugadores de fútbol: Reina, Juanito, Sergio Ramos, Guiza,,,,,,,,,,, bueno sí, de acuerdo, este último al menos nos ha dado vergüenza ajena y un ejemplo grande de como no debemos educar a nuestros hijos. Tampoco le ha dado nada, a mi entender, Adelita Domingo o los otros galardonados pues nada han hecho desinteresadamente.
Para mi estos señores galardonados son tan merecedores como los “normales” mentados, pues todos son profesionales que hacen lo que saben a cambio de unos emolumentos, quizá más necesarios y contributivos, al bienestar general, los primeros que los últimos.
No todos somos iguales, eso es evidente. Mientras no vea en una recepción oficial de la Junta a una verdadera representación del pueblo no me creeré lo de la igualdad. Creo que es merecedor de participar en estos eventos cualquier ciudadano que dedique su vida a: trabajar, cuidar y educar a sus hijos, cumplir con sus mayores, pagar sus impuestos y colaborar en lo posible a la convivencia de todos. Cuando me vea representado por algún galardonado con una Medalla de Andalucía empezaré a darle valor, mientras esto no ocurra me seguiré sintiendo insolidario e indiferente a quien se las dan y también, desgraciadamente, avergonzado de algunas de las entregadas.
Ahí queó, ¡miarma!

P.E. Perdone Sr. Chaves, por faltar ayer a la citación que me envió para que acudiera al Parlamento, pero es que en la taberna de mi barrio había gente más interesante y preparada para pasar un buen rato y hablar de cosas de Andalucía.